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PLEITO ENTRE PILLOS
Que tienen en común José Susumo Azano Matsura, Ramón Eugenio Sánchez Ritchie, Eugenio Elorduy Walther y la empresa Sempra Energy? Que según opinión popular, son una bola de pillos.
Sempra Energy, es una empresa trasnacional, instalada en el puerto de Ensenada, desde donde abastece de gas natural a toda la costa oeste de Estados Unidos, incluyendo obviamente a California, considerada la octava economía del mundo y además abastecedora de la Comisión Federal de Electricidad en el noroeste del país. Se considera que en caso de agravarse su situación jurídica, podría ocasionar un conflicto de carácter internacional, incluso que Barack Obama tratara el asunto con Enrique Peña Nieto.
Esta empresa ha sido participe de grandes escándalos en la unión americana, uno de los más recordados es cuando hace no muchos años simuló una escasez de gas en el estado de California, desviando perversamente los envíos de gas natural que provenían de otros estados, lo que provocó que los precios de electricidad al público se elevaran escandalosamente en poco tiempo. Originado por denuncias de usuarios y las empresas productoras de electricidad privadas, les tuvieron que regresar más de ochocientos millones de dólares a dichos consumidores.
Eugenio Elorduy Walther, siendo gobernador del estado, utilizando -según opinión de muchos- tráfico de influencias, logro la operación de dicha empresa; consiguiendo la concesión con el Gobierno federal, de una actividad aparentemente ilegal e irregular; según acusaciones se aparenta la compra del terreno donde se ubican las instalaciones de la misma; también lo acusan de utilizar el Registro Público de la Propiedad y de Comercio para hacer una operación fraudulenta; según unos, se aparenta la compra del terreno a una señora fallecida dos años antes de la operación mercantil; se dice que el alcalde ensenadense Antonio Catalán Sosa, recibió ordenes de otorgar todos los permisos municipales requeridos por la transnacional.
Llegando al extremo del cinismo, la indecencia y del latrocinio, de que la “supuesta joya” del gobierno de Elorduy, el boulevard más caro del mundo, conocido como “Corredor 2000”, independientemente de que inicialmente se programo con un costo de 650 millones de pesos, pasando al poco tiempo a 850 millones, siguiendo a 1,200 millones de pesos, casi al final de su construcción ya se hablaba de 2,400 millones, llegando la cifra final a alrededor de tres mil millones, prácticamente cinco veces más de lo programado inicialmente, y siendo inaugurada por los presidentes Vicente Fox Quezada y Felipe Calderón Hinojosa, cerca de una docena de veces –increíble pero cierto-, llegando al extremo del valemadrismo, de ni siquiera cambiar la ubicación de donde se realizaba la “supuesta” inauguración, es decir, se hacia en el mismo lugar una y otra vez.
Pero no se conformo con el latrocinio del erario público, sino que según se informo, parte del propósito de dicha vialidad, fue el de llevar en medio y/o al costado -es decir paralelamente- de la misma, el ducto de gas de la planta de Sempra Energy, desde la estación de descarga –es decir punto de origen cercano a Ensenada- hasta el territorio de los Estados Unidos.
Pero como se comento anteriormente, en el colmo del cinismo y del latrocinio, no conformes con lo anterior, los funcionarios estatales pertenecientes por cierto al panismo, cobraron esta “fastuosa obra” al pueblo, no solo vía erario público, sino que cobraron el costo de la misma a los propietarios de los terrenos colindantes con la citada vialidad. Quienes no aceptaron pagar tan onerosa obra, fueron incautados en sus propiedades, es decir el gobierno del estado les quito sus bienes. Si, como usted pensó, como viles bandidos.
De que el gobierno estatal ha sido ladrón, no queda la menor duda, en este caso en los gobiernos de Eugenio Elorduy Walther y de José “Lu pillo” Osuna Millón… digo Millán, ni que decir. Pero se pasaron, cobraron por la obra 5 veces su valor, y no conformes con eso se llevaron una “lana” de Sempra Energy, pero como son insaciables, también les cobraron a precios exorbitantes a los vecinos de la vía de comunicación, pero como son “cochis” hasta el infinito, rematan quedándose con los mejores terrenos.
Otro de los servicios prestados por el gobierno de Elorduy Walther a Sempra Energy, fue la expropiación del la zona conocida como “El Monumento” en la Delegación de Playas de Tijuana, donde la empresa –también- transnacional Marathon Oíl instalaría una planta regasificadora, co una ubicación privilegiada, ya que seria a unos cuantos cientos de metros de la línea que delimita con los norteamericanos, lo que le daría considerable ventaja sobre su competidora de Sempra. Más descarada no podía ser la protección institucional, a pesar de los golpes de pecho de estos folklóricos funcionarios.
Incluso como empleados de Sempra aparecen o han aparecido, entre otros: Erika Elorduy Blackaller, hija del ex gobernador, Francisco Javier Molina Robles y Bernardo Martínez, secretarios generales de Gobierno en su momento, y el último prácticamente con funciones de vicegobernador.
Cuando el pillo que cobraba como alcalde de Ensenada, Enrique Pelayo Torres, ordeno el cierre temporal de Sempra Energy, lo cual sucedió previo cobro a Susumo Azano de 2 millones de dólares depositados en la cuenta del junior del funcionario municipal, el gobierno estatal intervino en defensa de la transnacional.
El “Lu pillo” Osuna Millán ordeno a su secretario de Gobierno, Cuauhtémoc “ven pa´ca” Cardona Benavides, mandar a la policía ministerial y estatal preventiva –más conocida como pepos-, a proteger las instalaciones de la citada empresa contra cualquier intervención de la policía municipal ensenadense, amenazando a Pelayo Torres con repercusiones legales y políticas de seguir insistiendo en medidas punitivas contra Sempra. Como todo en esta historia, entre pillos se vean.
José Susumo Azano Matsura, es un mexicano de origen oriental, hijo del empresario Susumo Azano Moritani, presidente de Grupo Azano, un influyente consorcio constructor cuya sede esta en la ciudad de Guadalajara, el cual comenzó sus acciones empresariales en Tijuana a principios de los anos noventas, en que estableció sus oficinas en el Condominio Paseo, en Zona del Río, y comenzó a invertir sumas interesantes de dinero esa época es la considerada como la del boom de la construcción en esta ciudad, aunque se dice que los principales inversores eran los hermanos Arellano Félix.
Manejaba los negocios mediante el “blof”, incluidos los vehículos lujosos y el estar siempre custodiado por una buena cantidad de guardaespaldas, mediante lo cual estableció contactos con empresarios locales –sobre todo los pertenecientes a familias de las más rancias familias tijuanenses-, con los cuales acostumbraba cerrar tratos y después incumplir con los mismos, pero eso si, siempre llevándose una buena cantidad de dinero.
En aquel tiempo, compro un valiosísimo y privilegiado –por la cantidad de metros y colindancia con el mar, en lo que hoy se conoce como Fraccionamiento La Perla- predio en el Fraccionamiento Playas de Tijuana, negociado directamente en la ciudad de México con altos directivos de INCOBUSA, dependiente en aquella época de SEDESOL y que eran gente muy cercana a la maestra Elba Esther Gordillo, en lo que se comento que se manejaron cifras interesantes para todos los participantes.
Acostumbrado a terminar en litigio sus negocios, este no fue la excepción, terminando por traspasarlo a empresarios de la localidad, a cambio de una compensación de unos cuantos millones de dólares.
Siendo uno de los empresarios consentidos del entonces presidente de la republica Ernesto Zedillo Ponce de León, aprovecho influencias para hacer negocios en la frontera norte de México, principalmente Baja California –de donde Zedillo decía ser oriundo “por voluntad manifiesta”- y su vecina ciudad de San Diego, donde compro inmuebles y según se dice hasta “un banco”, incluyendo una residencia en Coronado Cays, donde presume “ser vecino” de Elba Esther Gordillo. Y como la mayoría de sus actividades las realiza en la capital mexicana, presume la propiedad de un moderno jet para sus traslados.
Entre sus “chistes”, esta haber vendido más de un centenar de viviendas en el fraccionamiento Hacienda Lindavista de la ciudad de Tijuana, “pelándose” de la ciudad con el dinero recibido. Aunque llovieron las demandas, acostumbrado a “comprar voluntades”, salió impune.
Con los gobiernos panistas de Jalisco, hizo incontables negocios, entre los cuales está la fabricación de placas para vehículos automotores, por medio de su empresa Diseños e Impresos de Seguridad, con problemas por su ínfima calidad y que se despintan. Siendo rechazado en los estados de Chiapas y Coahuila, por los motivos expresados en líneas anteriores.
A mediados de la administración calderonista, vendió a la Secretaría de la Defensa Nacional equipo de espionaje e inteligencia por 5 mil millones de pesos, sin que fuera distribuidor oficial, menos fabricante, para lo cual solo le basto instalar ex profeso, una oficinita en un edificio de interés social.
En los pasillos de palacio, cuentan la anécdota de que su Némesis fue Claudio Rufo, quien literalmente lo “asalto” en un elevador de Palacio de Gobierno en Mexicali, con el fin de para exigirle el pago de medio millón de dólares de comisión por el contrato de fabricación de placas para los vehículos de Baja California, acordado minutos antes con Ernesto -el gobernador-, y hermano de Claudio. Obviamente el dinero pagado y apoquinado sin chistar.
Asano Matsura, cuya fortuna esta valuada en más de treinta mil millones de dólares, según comentarios, es investigado por las agencias de inteligencia norteamericanas desde hace tiempo. Lo cual en un momento dado podría estallar un escándalo por la corrupción y el tráfico de influencias de numerosos políticos mexicanos, algunos por favorecer a Sempra y otros a José Susumo, entre estos últimos entre otros estarían los “izquierdistas” Jaime Cleofás Martínez Veloz y José Narro.
Se dice que su interés en la batalla legal que se libra para afectar a Sempra Energy, es por dos vertientes, la primera el precio y plusvalía que tienen esos predios una vez desarrollados por la primorosa vista y su colindancia con el mar, y la segunda es que después de la inversión hecha por Sempra en instalaciones, en caso de perder la propiedad y posesión del predio, seria fácilmente “extorsionable” para obligarlos a comprar al precio que se le quiera exigir.
Eso fue lo que lo llevo a comprar los derechos litigiosos –se dice que entre cinco y quince millones de dólares-, a un individuo, invasor profesional de predios, como lo es Ramón Eugenio Sánchez Ritchie.
Ramón Eugenio Sánchez Ritchie es un invasor profesional de predios, desde hace por lo menos unos 30 años, el cual junto con uno de sus secuaces de confianza que responde al nombre de Rodolfo Rosas Corrado, se ha dedicado a apropiarse de una serie de Inmuebles ubicados sobre los costados de la carretera Escénica Tijuana–Ensenada, sobre todo entre los kilómetros 75 a 84 (entre ellos el del pleito con Sempra), los cuales comprenden varias centenas de cotizadas hectáreas, en algunas de las cuales existían proyectos de sus legitimos propietarios, para desarrollo habitacional y comercial, sobretodo dirigido al mercado norteamericano.
La apropiación de algunos de estos predios, se dio gracias a la protección y complicidad de la entonces subprocuradora general de justicia del estado en Ensenada, Sonia Patricia Navarro –de quien se dice es cercana a los afectos de exgobernador y exsenador Alejandro González Alcocer-, quien instruyo a sus colaboradores, Lidia Gallegos, directora de averiguaciones previas, y a su consentido el agente del ministerio público del fuero común en Francisco Zarco, Juan Esteban Delgado Beltrán, para llegar al extremo de ilegalmente detener con fines de desalojar a la legitima dueña de algunos de estos predios, para que mientras esto sucedía, Sánchez Ritchie y compinches, tomaran posesión de los predios en cuestión, y poder meter una “traila” con 2 o 3 gentes, con el fin de “demostrar” la posesión, todo lo anterior, protegidos por los agentes de la policía ministerial adscritos a la agencia en Francisco Zarco. Hay que mencionar que hija de Sánchez Ritchie, trabajaba y era cercana a Sonia Patricia Navarro.
Su tan cacareado título de propiedad, así como los de sus compinches, expedidos por la Secretaria de la Reforma Agraria, fueron declarados desde hace años, nulos y por tal motivo se les cancelo su inscripción en el Registro Público de la Propiedad, lo que significa que el supuesto derecho de propiedad y posesión que alegan estos “señores” es por decir lo menos falso.
En declaraciones judiciales, Sánchez Ritchie dice que mediante un supuesto contrato verbal, efectuado “hace mas de 20 años con un tal General del cual no me acuerdo su apellido pero es Zúñiga”. Así o más ridícula la declaración. La apropiación de predios los hace con información y datos obtenidos de manera, falsa, dolosa e ilegal.
Para una persona que se declara “humilde campesino”, es de llamar la atención que pueda financiar: los vehículos y trailas que utilizan la gente que deja haciendo presencia en los predios que se apropia; el pago de la gente que deja haciendo presencia en los predios que se apropia, así como los respectivos pertrechos; el pago de los abogados que llevan las múltiples denuncias penales, civiles, así como amparos, que presenta y que le presentan por el despojo de los predios, por la cantidad de procesos jurídicos y su complejidad estos fácilmente alcanzaran una buena cantidad de decenas de miles de dólares.
Un ejemplo de la cantidad brutal de recursos que se encuentran detrás de Sánchez Ritchie, es que en un solo Juicio de Amparo deposito una fianza por $13´000,000.00 de pesos M.N. (trece millones de pesos 00/100 centavos moneda nacional), lo cual se contrapone a la imagen de un “humilde campesino” que maneja ante la prensa.
En 2001, por solicitud de un juez de Distrito en Sonora, se cumplió una orden de aprehensión a contra el de nombre de Ramón Eugenio Sánchez Ritchie, por su coparticipación junto con Salvador Pulido Jiménez, en la comisión de un famoso fraude en la sociedad de ahorro y préstamo denominada “El Arbolito”. Como usted vera, experiencia en fraudes y pleitos con la ley, le sobra.
Por lo que usted estará de acuerdo, que todos los participantes en esta historia son pillos, por lo cual es un “pleito entre pillos”, el cual por cierto va para largo, tanto por los recursos monetarios de los titiriteros, como por el tamaño de las “ratotas” que están tras el asunto.
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INTRIGAS: Escrito por Ricardo Madrigal. Martes, 14 de Enero de 2014.
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