Cicuta
Jaime Flores Martínez
Roedor
Entronizado –durante los últimos 13 años– como director del Instituto del Deporte y la Cultura Física de Baja California (INDE), el maestro en Ciencias Saúl Castro Verdugo salió buenísimo para los negocios, aunque sean los propios.
Funcionarios de la administración de Francisco Vega de Lamadrid se muestran sorprendidos ante la capacidad de Castro por aumentar el dinero sin recurrir a la Bolsa de Valores. Desde inicios del sexenio de Eugenio Elorduy Walter, el señor Castro debió descubrirse con habilidades extremas para multiplicar dinero especialmente destinado a la promoción del deporte.
Maestro en Ciencias por la Universidad de Nuevo León y con maestría en Alemania, don Saúl Castro no alcanza la crítica sobre sus conocimientos. Este hombre conoce del deporte. Sin embargo, nadie le ha brindado un elogio porque –en tan solo 13 años– amasó una riqueza que muy pocos mortales logran tener a lo largo de su vida.
Castro debe saber que “personajes que le rodean” están seguros que su escuela «Santillana del Mar de Rosarito» se construyó con materiales y recursos destinados a la construcción del Centro de Alto Rendimiento (CAR) que se encuentra en las instalaciones de la UABC.
Quienes vivieron ese proceso recuerdan que la alberca del CAR fue presupuestada en 5 millones de pesos y finalmente costó unos 18 millones.
Personas que conocen el tema aseguran (en franco pitorreo) que su escuela Santillana del Mar es conocida como “Santa Niña del CAR”. Esas mismas personas reconocen que el señor Castro ha cuidado parcialmente las formas al involucrar en sus negocios a personas clave en el manejo de los recursos públicos.
Uno de ellos es su compadre César Osuna, quien actualmente despacha como responsable del INDE en el Puerto de Ensenada. Osuna dirige en sus tiempos libres un exclusivo gimnasio que cuenta con la más moderna tecnología para el desarrollo del deporte. Es casi seguro que aquel que asegura que Castro Verdugo utiliza a su compadre como presta-nombre, está corroído por la envidia.
Otro gimnasio que los perversos adjudican a Castro se localiza en Tijuana en la popular colonia 20 de Noviembre. Se trata de un enorme inmueble también equipadísimo, un negocio dirigido por una dama de nombre Andrea cuyo máximo logro fue haber sido empleada de Castro.
Si durante los últimos cinco años el señor Castro pudo temer un descobijo, su nerviosismo debió disiparse al saber que el gobernador sería Francisco Vega de la Madrid, quien fue su patrón durante su gestión como presidente municipal de Tijuana.
Saúl Castro Verdugo laboró como responsable del deporte en Tijuana durante la gestión de Vega de Lamadrid.
Por aquellos tiempos, apenas concluyó la gestión de Kiko, Castro Verdugo fue nombrado director del INDE en la administración estatal que iniciaba Eugenio Elorduy Walter. Castro bateó a placer durante esos seis años, aunque también sonrió al conocer que el sucesor del Elorduy era José Guadalupe Osuna Millán, quien lo ratificaría en el cargo.
Muchos de sus críticos estiman que el señor Saúl Castro hizo –en el anterior sexenio–prácticamente lo que le dio la gana. Algunos de ellos especulan sobre propiedades que Castro posee en el Valle de San Quintín donde tendría centenares de hectáreas destinadas a la siembra de hortalizas.
Además deja saber que es propietario de un restaurante de comida rápida ubicado frente a las instalaciones de la Universidad autónoma de Baja California, en la zona de Otay.
Empleados del INDE y deportistas locales, se explican a medias como Saúl Castro logró amasar una incuantificable fortuna en medio de una impunidad que espanta. Saúl Castro nunca le han publicado los pequeños detalles que ofrece su evidente fortuna. Castro es un hombre hábil, también para el deporte,
Puma
El empresario Rodolfo Rodríguez, propietario del predio utilizado como basurero en la zona de El Jibarito de Tijuana, debió sacar la cara ante la oleada de críticas planteadas el pasado miércoles. Vecinos del Jibarito bloquearon la entrada principal del basurero reabierto por decisión del Tribunal de lo Contencioso Administrativo.
Aunque los vecinos protestan por las afectaciones a la salud que provoca este tiradero, el señor Rodríguez, conocido como el Puma, rebate esos argumentos al asegurar que durante los últimos 30 años este tiradero ha utilizado las técnicas más modernas en el tratamiento de la basura.
La lógica indica que con 30 años este basurero ya cumplió con su vida útil. La autoridad ya lo dio por muerto. Ya no sirve para depositar desechos, aunque Rodríguez dice que sí. Solamente que mande hacer un edificio para almacenar la basura.
Pena
Qué vergüenza pasarán los propietarios de predios que adeudan impuesto predial en Tijuana. El miércoles comenzó la colocación de letreros que rezan «predio en proceso de embargo por adeudo del impuesto predial».
Puede que los dueños de esos predios no tengan lo suficiente para pagar el monto, aunque eso no es pretexto. Se puede firmar un convenio… Qué pena. Que exhibida.
Cicuta.com.mx twitter: @jaimecicuta Viernes, 26 de Septiembre de 2014.
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