Cicuta
Por Jaime Flores Martínez
Viernes, 25 de Marzo de 2016.
Verdura
Acostumbrados a exprimirle los bolsillos a los incautos que se enredan en sus garras, algunos empleados municipales evidencian contubernio con empresas concesionadas por el Gobierno Municipal.
Un ejemplo de ello es Ricardo Castellanos, encargado del área de Entrega de Vehículos de la Delegación Municipal de la Zona Norte de Tijuana.
En su intento de saquear al ciudadano Ariel Alvarado Acosta, don Ricardo Castellanos le advirtió que no le regresaría su vehículo Dodge Caravan 2001 hasta que no liquidará el arrastre y almacenamiento de una bicicleta que resultó dañada en el accidente de tránsito.
Aunque Alvarado llevaba consigo todos los pagos necesarios para recuperar su camioneta, el empleado Castellanos le salió con que debía pagar por una bicicleta que ni siquiera le pertenece.
El agente del Ministerio Público encargado del tema debe saber que a Castellanos le vale verdura que el caso haya concluido.
Luego de las diligencias correspondientes, el MP canaliza a los involucrados para que recuperen sus vehículos previó pago del arrastre y almacenamiento de los vehículos.
En lo correspondiente a estas maniobras, la empresa que tiene la concesión del Gobierno Municipal de Tijuana es Grúas Olmos.
Y aunque la concesión les representa un jugoso negocio, los operadores de esta empresa pudieron establecer acuerdos con los empleados municipales encargados de cobrar arrastres y almacenamientos.
Solo así podría entenderse que Ricardo Castellanos exija que el ciudadano Alvarado pague por un vehículo (una bicicleta) que ni siquiera es suya.
Distinto sería si el Ministerio Público lo hubiese ordenado.
Y aunque Alvarado tiene la oportunidad de denunciar ese abuso ante la Sindicatura, el ciudadano decidió regresar a la barandilla donde Castellanos le dibujó una cuenta de 2 mil 462 pesos.
Allí se incluye el arrastre y almacenamiento de una bicicleta, con su respectivo IVA, además del pago del fomento a la educación y del fomento al turismo.
Si Alvarado no paga la ocurrencia de Castellanos, entonces no podrá recuperar su gastada camioneta utilizada para trasladarse en su modesta actividad de guardia de seguridad.
Aunque Cicuta tiene fundadas sospechas del contubernio entre los concesionarios de Grúas Olmos y empleados municipales, el compromiso es investigar y luego desenmascarar a esos abusivos que acostumbran poner al revés a los ciudadanos, para vaciarles los bolsillos.
Ausente
Un par de periodistas de Tijuana se referían el martes a la ausencia del candidato independiente Gastón Luken Garza en las redes sociales.
Si esa fue su herramienta principal ¿por qué la abandonó?
Para uno de ellos, en las últimas semanas el ex diputado federal perdió presencia y esto se nota porque algunos de los aspirantes reforzaron su presencia en las redes sociales.
Ahí está por ejemplo el ex secretario de Seguridad Pública de Tijuana Julián Leyzaola, doña Carolina Aubanel Riedel e incluso Carlos Atilano Peña.
Ellos aprovecharon la coyuntura para muestrearse ante una sociedad apática pero adictos a las redes.
Si bien Gastón Luken tiene buena imagen ante la comunidad, también es cierto que destacó en Facebook por su presencia permanente.
Seguramente algunos de los “cerebros” que le rodean le recomendaron ausentarse por algunas semanas, aunque eso es –sin duda– un gravísimo error.
Quienes conocen de comunicación saben perfectamente que la imagen permea en la medida que se difunde.
Los mexicanos, no tenemos memoria.
En términos mercadológicos, el que no enseña no vende.
Radio
El periodista Fernando del Monte y el autor de Cicuta son mancuerna en Fórmula Tijuana, que se transmite de lunes a viernes a la una y media de la tarde por la frecuencia 950 de amplitud modulada, Radio Fórmula Tijuana.
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