Apeste

Cicuta

Por Jaime Flores Martínez

Miercoles, 09 de Noviembre de 2016.

Apeste

Empecinado en rescatar su despedazada reputación, el empresario mexicalense Raúl Villarreal Álvarez no halla la forma de cambiar la percepción social.

¡Su fama de transa lo perseguirá!

Lo mismo recurre a los medios de comunicación, que utiliza al abogado Elías Flores Gallegos para intentar resanar su fracturada imagen.

Hace 15 días Villarreal fue arrestado en Mexicali y trasladado a Jalisco para responder por un fraude superior a los 143 millones de pesos.

Mientras Villarreal estaba encarcelado en Jalisco, su abogado en Mexicali Elías Flores cometía la «burrada» de señalar que no era «fraude» sino «un negocio truncado». ¿Si acaso no se trunca se configuraría el fraude?

En su espontáneo protagonismo, el abogado Flores también adelantó que su cliente saldría libre apenas le fijaran la fianza.

¡Consiguieron cambiar al juez que le había negado la caución!

El asunto es que el jueves 27, ya instalado cómodamente en su domicilio de Mexicali, el señor Villarreal envió una carta a algunos medios que divulgaron su arresto.

Ahí subrayó “sus principios y sus valores”. También se asumió como accionista de diversas empresas, entre ellas una que opera en la ciudad de México.

Señala que –en esa empresa– uno de sus socios operadores signó un compromiso con una empresa del estado de Jalisco.

La institución bancaria que ofertaba los inmuebles tuvo conflictos internos e incumplió el compromiso. Villarreal señala que desde ese punto derivaron esos acontecimientos.

También subraya que un asunto de tipo mercantil se trasladó al ámbito penal.

En otra parte de la carta el empresario aclara que de ninguna manera se trató de un asunto fiscal como se ventiló en algunos medios de comunicación. Quién sabe cuáles.

Y aunque en su escrito el señor Villarreal pretende asumirse como víctima (aquellos que leyeron su texto aseguran que casi se compara con Juan Pablo II,) la realidad es que estuvo en la cárcel.

A manera de justificación señala que el juez encargado del proceso se alió con la parte demandante lo que provocó una acción parcial.

Sin duda que el señor Villarreal se revuelca al intentar modificar la impresión que causó su aprehensión, aunque debe entender que el juicio social derrumba sus esfuerzos mediáticos.

En relación a su abogado Elías Flores Gallegos, el propio Villarreal debió recomendarle mantenerse alejado de los periodistas.

Recordemos que el abogado Flores se volcó legalmente contra el periodista Jaime Delgado, director de un medio electrónico llamado Periodismo Negro.

Elías Flores tejió el proceso legal para fastidiarle la vida al periodista Delgado, quien se atrevió a publicar detalles de la relación sentimental entre el alcalde y una empleada que recibió extraordinarios beneficios.

 La señora Sonia carrillo, antes novia y hoy esposa del aun alcalde de Mexicali Jaime Díaz Ochoa, contrató al licenciado Elías para ventilar su coraje por las descobijadas.

Con esas acciones Flores Gallegos se ganó la apatía de la mayoría de los reporteros, lo que significa que –su intervención en el caso que nos ocupa– dañaría más la imagen del señor Villarreal.

Hace semana y media, don Elías intentó tímidamente pactar un encuentro con Cicuta, aunque alguien debió ubicarlo en la realidad. Para interceder por alguien más, obligadamente se debe tener la cola corta

Por cierto, en ningún momento de esta historia (contada por Villarreal) se alude la participación del presidente nacional de Coparmex Gustavo de Hoyos Walter.

Cicuta subrayó que este último influyó en el relevo del juez que había negado la caución en favor de Villarreal. A lo mejor no lo hizo, tal vez lo dejo solo. Quizá lo despreció y deseó que su amigo se pudriera en la cárcel.

Gustavo de Hoyos es originario de Mexicali y se supone que “un altísimo servidor público” le pidió que moviera “sus hilos políticos” para que cambiaran el juez encargado del caso.

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