Pelas / PDH

Cicuta

Jaime Flores Martínez

Pelas

Encabritado por la descobijada del pasado viernes, el abogado David Jesús Rincón Rey decidió replegarse del ejercicio de sus jugosas transas. Desde algún lugar fuera de Tijuana, su cómplice y amigo, el consejero jurídico del Gobierno local Gerardo Herrera Zavala, le sugirió «desaparecer» temporalmente del mapa para desactivar el escándalo.

Y es que el pasado viernes Cicuta reveló que –a principios de mes– ambos personajes intentaron comprar un lujosísimo automóvil Mercedes-Benz e intentaron pagarlo en efectivo. Los virtuales compradores tronaron contra el vendedor, pues les dijo que Hacienda solo autorizaba transacciones por un monto máximo de 209 mil pesos.

Tan absurdas políticas hacendarias impedían al dueto Herrera-Rincón deshacerse de parte del dinero obtenido esa semana. Aprovechándose de su cargo el consejero jurídico Gerardo Herrera diseño una estrategia para quedarse con parte de la indemnización de aquellos que fueron despedidos injustificadamente de administraciones anteriores.

Al recibir la notificación del Tribunal Laboral, el consejero Herrera contacta de inmediato a los interesados para venderles el favor. Allí les plantea la agilización del pago, aunque deberán contratar los servicios de un abogado externo que ellos mismos sugieren.

David Rincón Rey, amigo del consejero Herrera, se encarga de recomendar a Damián Vázquez, un abogado que emergió del género laboral precisamente para integrarse a la red de facinerosos. Convencido de la necesidad de las personas que esperaron años para su liquidación, Vázquez les pide porcentajes que van del 15 al 40 por ciento, según sea el caso.

Apenas cobraban el cheque de su indemnización, esas personas entregaban a Vázquez el dinero en efectivo y se supone que este último realiza el reparto entre sus cómplices.

Cicuta subrayó que a principios de mes, el consejero Gerardo Herrera y su peón David Rincón acudieron a la lujosísima agencia automotriz a comprar un vehículo de lujo. Ambos llevaban una maleta con más de 600 mil pesos en efectivo, aunque esto no impactó en el ánimo del vendedor.

Al conocer perfectamente su identidad, el encargado de las ventas aclaró que “solamente”podrían pagar 209 mil en efectivo y el resto en documentos. La idea es –dijo–respetar las disposiciones de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público.

Lo destacable es que los abogados Herrera y Rincón se identificaron plenamente ante el vendedor de automóviles para no crear confianza. Aunque su apariencia no semeja a un par de narcotraficantes, prefirieron proyectar una ingenuidad que rayó en la estupidez. ¿Cómo mostrarse como funcionarios si pretendían incurrir en una prohibición federal?

Algunos abogados laboristas estiman que el monto destinado para el pago de indemnizaciones, supera ese año los 50 millones de pesos.

En el pago de indemnizaciones por despido injustificado, la Consejería Jurídica debe avalar el pago ante la oficina de Ingresos del Ayuntamiento, pues de otra manera el cheque no se entregará. Esto, sin duda, le da un enorme poder a la oficina que encabeza Gerardo Herrera.

Solamente en una de los laudos laborales, la mancuerna Herrera-Rincón obtuvo más de 600 mil pesos de ganancia, porque decidieron ignorar el segundo laudo emitido por el Tribunal Laboral. Este último había ordenado liquidar con un millón 600 mil pesos a dos personas destituidas de la administración del panista Jorge Ramos Hernández.

De haber atendido el error del Tribunal Laboral, sus ganancias hubiesen reducido considerablemente. La diferencia pudo ser de medio millón de pesos, en un solo caso.

Para aquellos ciudadanos con poca memoria, Cicuta está en capacidad de recordar que David Rincón Reyna despachó en la primera parte de la administración de Jorge Ramos como titular del Tribunal de lo Contencioso Administrativo de donde fue destituido en junio del 2009.

La versión fue que el licenciado Rincón habría incurrido en intento de fraude al falsificar la firma del entonces Consejero Jurídico Raúl Corona Sesma. El documento firmado avalaba la reinstalación laboral de un personaje con turbia reputación.

David Rincón es un personaje que tiene una historia oscura, situación que seguramente influyó para integrarse al selecto equipo de amigos del actual consejero jurídico Gerardo Herrera Zavala, finísima persona, como ya se relató.

PDH

Raúl Villa Velázquez, el empleado de la Procuraduría de los Derechos Humanos de Baja California (PDH), que estacionó el vehículo oficial en el cajón reservado para personas con discapacidad, fue autorizado por el jefe del estacionamiento del Palacio Municipal José Luis Lemus.

En una carta enviada por Claudia Olivas, titular del área de Comunicación de la PDH, se hace referencia a la columna del miércoles donde se realizó esa denuncia. Sobre ese tema, se hizo la investigación para deslindar responsabilidades.

Raúl Villa Velázquez transportaba a otro empleado discapacitado de la PDH, quien si portaba su gafete. Y aunque en la aclaración no lo dicen, es un hecho que Raúl Villa Velásquez, no padece ningún tipo de discapacidad mental.

Cicuta.com.mx twitter:@jaimecicuta      Lunes, 21 de Julio de 2014.


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