Cicuta
Jaime Flores Martínez
Casinero
Acostumbrado a sacar provecho económico de cualquier circunstancia, al ex alcalde de Tijuana Carlos Bustamante Anchondo le importa una lenteja pisotear los intereses del sector hotelero, al cual –por cierto—pertenece.
Y es que con tal de abrir su propio casino, don Carlos Bustamante «ordenó» a su empleado Carlos Maldonado (quien además es el presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Tijuana) recular en la intención de los hoteleros de ampararse contra la descarada ambición del Gobierno de Baja California, mejor dicho del secretario de turismo Oscar Escobedo Carignan.
Resulta que la administración estatal, a través de la Secretaría de Turismo, decidió quitarle a los hoteleros 70 millones de pesos que anualmente generan y utilizan para la promoción turística. Oscar Escobedo, titular de Sectur, tuvo la brillante idea de centralizar el dinero que aportan a través del impuesto al hospedaje.
A Escobedo no le gustó que los hoteleros utilicen su propio dinero para promocionarse. ¿Por qué mejor no se lo gasta él? !Mire que fresco!
Desde octubre pasado hoteleros de los cinco municipios del Estado advirtieron que pedirían al gobernador Francisco Vega la remoción de Escobedo, un funcionario dedicado a pasearse por el mundo bajo el argumento de promocionar Baja California.
Para callarle la boca a los inconformes, hace una semana el gobernador Vega publicó en el Diario Oficial del Estado el decreto que centraliza los Fideicomisos de Promoción Turística. En otras palabras, el gobernador le compró la idea a su compadre Escobedo para arrebatar legalmente esos 70 millones de pesos.
Al publicarse ese decreto, los hoteleros acordaron ampararse ante una medida que sin duda atenta contra sus intereses y contribuye a alimentar la desmedida ambición de Escobedo, un funcionario dedicado a pasearse y a comer como rey y beber como príncipe.
Enterado de la intención de los hoteleros o seguramente alertado por la autoridad estatal, el ex alcalde de Tijuana Carlos Bustamante debió llamar a cuentas a Carlos Maldonado. ¿No entenderá que debe alinearse con su patrón?
Además de ser su empleado (pues es gerente general del Grand Hotel) Carlos Maldonado también despacha como presidente de la Asociación de Hoteles y Moteles de Tijuana.
Si los hoteleros lograsen tener el amparo de la justicia Federal, seguramente don Carlos encontraría trabas suficientes para no inaugurar el casino que consiguió desde que despachaba como presidente municipal. Antes de abandonar el cargo, Bustamante se“auto-autorizó” un permiso de uso de suelo para instalar un casino en el hotel de su propiedad, ubicado por los rumbos del Boulevard Agua Caliente.
Y aunque la autorización de casino la expide el gobierno federal, se hace necesario el aval del gobierno municipal en la expedición de un documento conocido como “uso de suelo”.
Se supone que Bustamante recibió una llamada de un alto funcionario estatal, quien le pidió interceder para evitar que los dueños de los hoteles presentaran este amparo. Si llegasen a obtenerlo, seguramente se reducirían las posibilidades de abrir su casino.
Versiones extraoficiales revelan que al gestionar su permiso para casino, Bustamante generó la irritación de su amigo el Zar del juego Jorge Hank Rhon. Este último fue ignorado por su entrañable amigo Bustamante en su decisión de operar su propia casa de juego.
De regreso al tema de los hoteleros, el señor Bustamante se entrevistó con Carlos Maldonado para solicitarle evitar la presentación de ese amparo “a costa de lo que fuera”.¡Bustamante no arriesgaría la apertura de su casino!
El pasado lunes el columnista conoció que Maldonado traicionó el compromiso establecido al rendir protesta como presidente de esa agrupación. ¿Qué clase de presidente elegimos? Se preguntan los hoteleros.
Se supone que al conocer la actitud de Maldonado, el secretario de turismo Oscar Escobedo Carignan debió sentir un intenso hormigueo a la altura del ombligo. Con la yema de sus dedos sació la comezón y con eso llegaron las carcajadas.
Con tanto conflicto, seguro que los hoteleros inconformes ya no recurrirán a pedir la remoción de Óscar Escobedo pues ahora entienden que el compadrazgo con el gobernador Vega está más allá de la amistad.
Y aunque el decreto centralizador ya está publicado, los dueños de los hoteles y moteles del Estado analizan recurrir a la solicitud individual de un amparo que cancele el llamado impuesto al hospedaje que –en este caso—representa el 3 por ciento de la tarifa pagada.
Si ellos aportan esos 70 millones de pesos anuales y el gobierno quiere quedárselos, entonces es mejor mantenerse al margen y no cobrarle ese impuesto a quienes ocupan sus cuartos de hotel.
Radio
El periodista Fernando del Monte y el autor de Cicuta son mancuerna en Fórmula Tijuana, que se transmite de lunes a viernes a la una y media de la tarde por la frecuencia 950 de amplitud modulada, Radio Fórmula Tijuana.
Cicuta.com.mx twitter: @jaimecicuta Miércoles, 28/Enero/2009.
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