Cicuta
Jaime Flores Martínez
Chaqueta
Satisfecho porque Cicuta atendió su petición de «lavarle la cara», el secretario de Protección al Ambiente de Baja California Carlos Beichalei Greizbord Ed se resiste a entender que –por encima de intereses presumiblemente embarrados de dinero— su obligación es defender el medio ambiente.
No es posible que don Carlos levante los hombros ante una decisión tomada por el Tribunal de lo Contencioso Administrativo que -el pasado 19 de diciembre-, ordenó la reapertura de un relleno sanitario ubicado en la zona del Jibarito en Tijuana.
Lejos de probar que la oficina a su cargo maniobra para mantener el equilibrio ecológico en una zona densamente poblada, el secretario Greizbord justifica la reapertura de ese lugar al mostrarse “respetuoso” de una decisión tomada por el titular de un tribunal.
Cierto que la resolución tomada por el Tribunal de lo Contencioso Administrativo permitió a los propietarios de ese predio reiniciar operaciones de un tiradero que atenta contra la ecología y pone en riesgo la salud de sus pobladores.
Sin embargo, no se entiende cómo el funcionario responsable de defender el medio ambiente se cruzó de brazos al no apelar una decisión a todas luces incorrecta.
Al conocer la determinación tomada por el titular del Tribunal de lo Contencioso, licenciado Roberto Vidrio, el secretario de Protección al Ambiente debió ordenar a su equipo jurídico rebatir los argumentos que utilizó el juez para tomar una determinación torcida.
Greizbord debe saber que Roberto Vidrio no es precisamente “una hermana de la caridad” pues sus antecedentes permiten sospechar que los intereses económicos pudieron esconderse en su decisión.
Para información del respetable, Roberto Vidrio fue aquel personaje que a mediados de la administración de Carlos Bustamante Anchondo fue detenido en uno de los filtros colocados por la Policía Municipal para detectar personas que conducen en estado de ebriedad.
Roberto Vidrio lanzó sapos y culebras contra los policías que se atrevieron a detenerlo al detectar que manejaba borracho. Aunque la autoridad municipal intentó echarle tierrita al asunto, la realidad fue que una autoridad estatal facilitó las cosas para que el borrachito pudiera quedar en libertad.
Respecto a la reapertura del basurero en El Jibarito, el secretario Greizbord debe entender que existen recursos jurídicos para rebatir la decisión tomada por el señor Vidrio. Si el equipo jurídico de la Secretaría tiene dos gramos de materia gris y uno de conocimientos, entonces deben sugerirle promover un recurso de apelación para rebatir la decisión de Vidrio.
Esos mismos abogados deben recomendarle promover un amparo para que dicho relleno sanitario deje de operar.
Seguramente el gobernador del estado Francisco Vega de Lamadrid supone que don Carlos Greizbord es un funcionario dedicado exclusivamente a cumplir con su responsabilidad. El mandatario estatal no sabe que Greizbord se dedica a promover proyectos para la construcción de puentes en Tijuana.
Resulta que este hombre tiene constante comunicación con Daniel Rubio Díaz de la Vega, titular del Instituto Metropolitano de Planeación (IMPLAN). Ellos son del mismo clan.
Desde hace algunos años, el señor Greizbord promueve obras mucho más “rentables” que la defensa del medio ambiente. Greizbord y Rubio Díaz, son hechura del ex director del IMPLAN Manuel Guevara, quien ahora mismo despacha como secretario de Infraestructura y Desarrollo Urbano del Estado de Baja California. A este trío no lo mata ni un póker.
Seguramente el gobernador Vega de Lamadrid desconoce que el secretario de Protección al Ambiente utiliza buena parte de su tiempo en proyectos que amarra con funcionarios que pertenecen a un gobierno distinto al suyo. ¿Cómo podría darse cuenta si está de vacaciones cada semana?
Kiko Vega debe saber que Greizbord pretende venderle sus proyectos a un gobierno priista y -de la misma forma-, la administración del priísta Jorge Astiazarán debe estar consciente que el encargado del IMPLAN otorga todas las facilidades a su amigo Carlos Greizbord para beneficio mutuo (o tripartita) con proyectos que deberían concursarse.
¿Cómo?
Miradas de desconcierto intercambiaron el lunes personajes cercanos a Jorge Alberto Hank, quien “oficialmente” es el propietario de los Xoloizcuintles de Tijuana.
Unos buscaban en los ojos de otros la filtración publicada por Cicuta hace un par de días. El hijo del ingeniero Jorge Hank es observado con un posible candidato del PRI a la alcaldía de Tijuana.
Y aunque algunos ciudadanos pudieron calificar esta idea como “descabellada”, la realidad es que personajes vinculados con el hankismo observan en este joven las posibilidades reales para contender por la alcaldía.
Su juventud y su talento podrían ser la llave en una puerta que se observa harto pesada, pero que podría abrirse con fajos de dinero
Radio
El periodista Fernando del Monte y el autor de Cicuta son mancuerna en Fórmula Tijuana, que se transmite de lunes a viernes a la una y media de la tarde por la frecuencia 950 de amplitud modulada, Radio Fórmula Tijuana.
Cicuta.com.mx twitter: @jaimecicuta Miércoles, 27 de Agosto de 2014.
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