Cicuta
Por Jaime Flores Martínez.
Miércoles, 02 de Marzo de 2016.
Golondrinas
Muy calladitos se quedaron los “lamesuelas” del empresario David Saúl Guakil al ser aplastado por la maquinaria priista.
El jueves pasado los jerarcas priistas «bajaron» a Guakil de la contienda. A pesar de invertir dinero, tiempo y engreimiento, esos tricolores marginaron su ambición.
Como no fue candidato a la alcaldía de Tijuana, el empresario metido a político dejó de patrocinar a su jauría disfrazada de lamesuelas.
Aquellos que satanizaron con términos carretoneros las críticas planteadas por Cicuta, escondieron la cabeza.
Seguramente algunos de ellos lo hicieron por necesidad, lo que justificaría que defendieran con ahínco a un personaje acaudalado pero sin escrúpulos.
Cicuta precisa que aquellas críticas sobre Guakil no esconden odios patológicos. La trayectoria periodística del escribiente ha mantenido la crítica, aunque en el caso Guakil se recrudeció por las maniobras que hizo para censurar las publicaciones.
Un político con oficio tolera la crítica, además de aplicar correctivos a señalamientos sensatos. Aquí no fue el caso.
Mientras que el oficio periodístico no obligue a lo contrario, Cicuta da por cerrado el tema Guakil.
Agobiado
Satisfecho con sus logros económicos como secretario de Seguridad Pública de Tijuana, Alejandro Lares Valladares renunció a su cargo porque no aguantó más presiones de la delincuencia.
Mientras que Lares anunció que dimitía para acabar con la perversa campaña mediática, el alcalde Jorge Astiazarán afirma que le pidió su renuncia. ¿Por qué habría sido hasta hoy?
Hay quien considera que, por ser un año electoral, el gobierno federal demandó la destitución de Lares.
Los incontrolables niveles de violencia y la extraña soberbia de Lares habrían sido un añadido al supuesto pedimento de la Secretaría de Gobernación.
Sujetándonos a los hechos, las bandas dedicadas a la distribución de droga en Tijuana le tomaron la medida al secretario Lares. Este ya no pudo con las presiones.
Un grupo delincuencial descobijo su relación con Lares en una de tantas narco-mantas que fue colocada en un puente del boulevard Insurgentes.
Aunque esos mensajes son entre ellos, la señal estaba dirigida hacia el secretario Lares.
Si el secretario de Seguridad no combatía a «los invasores» que llegaron a meterse en su territorio, ellos mismos se harían justicia. ¡De allí las matazones!
Aunque a Cicuta no le consta que Alejandro Lares recibía beneficios económicos de un grupo delictivo, es innegable que la lucha entre ellos se salió de control.
Nadie negaría que aquellos jefes policiacos que no se arreglan con los mañosos llegan prematuramente a la tumba. En caso contrario, generalmente, se vuelven ricos.
Un observador recurre al sarcasmo al referirse a la opulencia en el nivel de vida de un muchacho cuya familia batalló muchísimo para sacarlo adelante.
Hoy vive en el exclusivo fraccionamiento Puerta de Hierro de Tijuana, donde el lujo y la seguridad son garantía.
¿Y a los ciudadanos? ¡Que se los cargue el payaso!
Ahora saber dónde quedará Carlos Alberto Gómez Miguel, director de Inteligencia de la Secretaría de Seguridad Pública de Tijuana, lugarteniente de Lares.
Este hombre está mejor informado que el destituido secretario.
Además de conocer a fondo los oscuros agujeros de la delincuencia, también se encargó del establecimiento de los acuerdos que –finalmente– se salieron de control. Lares no pudo más.
Prefirió separarse del cargo porque la autoridad norteamericana comenzaba a sentirse traicionada. ¿Campaña perversa en su contra?
Naaaaaa, solo hechos.
Especulación
Sospechoso hermetismo envuelve el caso de una joven secuestrada y liberada el mes pasado en Tijuana.
Más allá de ser el primer plagio del 2016, puede tratarse de un asunto que involucra a un personaje que desempeña un puesto destacado en la estructura del gobierno federal.
Los especuladores suponen que eso influyó para que la procuraduría estatal abandonara momentáneamente sus bostezos. ¿El padre de esta chica les debía dinero?
Furibunda
Continuas explosiones de neurosis atacan a la doctora Alma Delia Martínez, encargada de urgencias en la Clínica 33 del IMSS en Tijuana. Sus pacientes corren el riesgo de infartarse con el maltrato que reciben. ¡Siempre anda de malas!
Francisco Beltrones, delegado del IMSS debe alternar a las encargadas de Atención y Orientación al Derechohabiente (TAOD) porque –al paso del tiempo– se hacen tan amigas de los majaderos que no reportan las quejas. ¡Establecen contubernios y así generan complicidad!
Beltrones debe habilitar nuevamente la rotación de TAOD y evitar vicios innecesarios.
Cicuta.com.mx twitter: @cicutabc jornadabc.mx
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