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PLEITO DE COMADRES
Así parecen los dimes y diretes que en días pasados se endosaron ida y vuelta, el actual alcalde tijuanense Jorge Astiazarán Orcíy sus perros, con el exalcalde Carlos Walterio Bustamante Anchondo y sus gatos, respecto a las múltiples irregularidades y la quiebra financiera del Ayuntamiento dejadas por la anterior administración.
El “vejete bucólico” Carlos Walterio Bustamiente, ofendido por las verdades que algunos se han atrevido a expresar después de que dejo el cargo –una gran mayoría callo mientras tuvo poder-, pero sobretodo por los señalamientos de funcionarios del actual XXI Ayuntamiento, incluyendo –en su momento- al alcalde, responsabilizándolo del desastroso estado en que entrego el municipio.
Ante el circo que se formo, después de unos cuantos intercambios de acusaciones y defensas efectuadas a través de los medios de difusión, llego el momento “critico”, cuando los dóciles levanta dedos denominados también regidores, aprobaron -por unanimidad- solicitar al congreso estatal auditar la gestión de Walterin. Aquí empezó la tragicomedia. Seria comedia si no se hubiera dejado en un estado tan trágico al municipio.
Las declaraciones de los funcionarios municipales no fueron algo extraordinario, es más, las vemos cada tres años con el cambio de administración, pero Carlos Walterio, que siempre se sintió el reyezuelo de la comarca, acostumbrado desde su nacimiento en pañales de seda a hacer rabietas de todo y por todo, no puede soportar que le restrieguen la realidad en que dejo sumida a la ciudad, menos que alguien de su “alcurnia” sea ligado a latrocinios, solo que la realidad lo alcanzo, aunque no como se merece, es decir no lo vemos de vacaciones… con Granier, el exgobernador tabasqueño encarcelado en ese tropical estado por situaciones similares.
Pero detengámonos un momento primero en los ineptos e incompetentes funcionarios municipales, y después en los más –si es que se puede ser más- ineptos e incompetentes alfombritas, levanta dedos que cobran como regidores.
Los funcionarios de la actual administración municipal, tienen la obligación de revisar y/o auditar, cada uno en su respectiva área, a la anterior administración, y en caso de “encontrar” alguna discrepancia o de plano rapacería, presentar las denuncias –tanto administrativas como penales- respectivas, no como según aparenta, solo declararlo a la prensa. Que recuerden que seguramente serán los denunciados dentro de tres años.
En cuanto a los regidores, según todo aparenta –salvo alguna excepción… que confirma la regla- la ineptitud es en grados supinos, eso de pedir al congreso local que realice algo que por ley realiza todos los años, es el colmo de la ignorancia. Lo curioso del caso es la unanimidad, incluyendo al alcalde, por lo que no puede fingir demencia.
Hay que recordar que entre los regidores están exfuncionarios y beneficiados del trienio pasado, como el exdelegado de Centenario, Jorge Alfredo Lu pillo Esrobar, que obviamente no pasaría el filtro de auditoria alguna, y así podemos nombrar unos cuantos más, hasta aquel disque líder de ambulantes beneficiado con las principales calles de la Zona Norte.
Regresando a Walterio Bustamiente, se descosió con insultos y retos a las actuales funcionarios del municipio, desde el que pareciera dicho por un niño de primaria o cuando mucho secundaria: «no quiero pleitos, pero no le saco»; pasando por llamar “ignorantes quienes piden auditar su gestión”; o “yo no tengo novias, solo una”, que quienes lo conocen dicen que es cierto… pero con muchas amiguitas, y más con cargo al presupuesto, eso sin contar que a la “novia” le dio uno de los principales cargos de su administración, doblando –no sea usted mal pensado- el presupuesto de la dependencia desde el primer día y así continuamente, hasta llegar a protegerla al ser uno de los funcionarios consentidos a los que no se les aplico en antidoping.
En su desesperada defensa, tanto personal como del XX Ayuntamiento, salió al paso de las críticas negando tajantemente lo innegable, al decir que en su administración no se incurrió en corruptelas o malos manejos administrativos. Queriendo pasar al ataque al afirmar algo incontestable por lo cierto, al decir que le “sorprende la ignorancia de los regidores al aprobar un punto de acuerdo de solicitar por escrito al congreso local una auditoria a su gestión, ya que deben saber –eso es pedir milagros-que por Ley, el congreso del estado revisa a los ayuntamientos de manera permanente”, rematando la frase con un rotundo “no sé cuál sea la intención de estar criticando sin saber”.
De hay paso a defender lo indefendible: la ampliación de rutas a la empresa transportista Altisa; un endeudamiento mayor al declarado; el pago irregular a la empresa responsable de las cámaras de video-vigilancia por ciento cincuenta millones de pesos, donde todavía se dio ínfulas de héroe al presumir que gracias a ese pago se “logro” que el gobierno municipal ahorrarse ocho mil millones de pesos que habría tenido que liquidar luego de las demandas que “la empresa ganó legalmente”, aunque no menciono que fueron sus “gatos” del área jurídica quienes en parte perdieron el juicio, según se dice, previa compen$ación; presume que entrego a la actual administración le entrego cuatrocientas cámaras de vigilancia activas, cuando la ciudad de México, solo para ampliación del servicio, compro siete mil más, en fin, mentalidad ratonera; en cuanto a las movidas del área de desarrollo urbano y obras públicas, tales como el encementado de avenidas como la internacional, donde procedieron a romper tramos que ellos mismos habían construido, independientemente de que se dice que se pago el triple de lo presupuestado, o los cincuenta millones disque gastados en los dos o tres primeros meses de su gestión en “supuestamente” tapar baches, en avenidas que de inmediato empezaron a reconstruir, o los millonarios “bisnes” con los cambios de uso de suelo y los permisos para obras, los permisos para instalación de gasolineras; luminarias; independientemente de una larga lista de etcéteras.
Parte de su defensa la fundo en que Órgano de Fiscalización del Congreso del Estado (ORFIS) y el propio congreso, ya dictaminaron una parte de su administración sin grandes contratiempos de por medio. Lo que no dice este pillesco “vejete”, es que en su momento se hablaron de irregularidades detectadas, pero como siempre acontece con los diputados, todo se resolvió en base a arreglos “políticos”, es decir que no se hicieran “olas”. Es del dominio público, que el anterior congreso estatal, con el aval del gobierno del estado, se dividieron los principales cargo de la ORFIS, y como parte de esa negociación se acordó que los impuestos –tanto por panistas, como por priistas- auditaran a los gobiernos –estatal y municipales- de su color o si usted lo prefiere, de su mismo partido, con lo cual las inmundicias fueron tapadas por sus respectivos compañeros.
En cuanto a las sindicaturas municipales y la contraloría municipal, son un mero cargo para los contribuyentes, ya que en realidad son tapaderas de los “amos” en turno, tornándose en cómplices y beneficiarios de las fechorías recurrentes de cada administración. Llegándose al denominar a los síndicos como cínicos municipales. Así o más claro.
Regodeándose de la ineptitud de sus contrarios, y con la impunidad que acostumbra a realizar sus “negocios”, le restregó en su cara a la ciudadanía, “que no entendía por qué lo criticaban cuando viajaba acompañado de asistentes, ya que esto lo hacen todos los mandatarios en el mundo, además no sabía que tenía que viajar con hombres”, imagínese a este sátrapa aldeano con ínfulas de “mandatario mundial”. Lo dicho, mentalmente no esta muy completo que digamos.
Se dijo “ofendido” de que su hijo aprovecho el cargo para hacer negocios, llegando a decir que su “hijo nunca se metió en nada de eso, y obviamente pobre no está, porque trabaja, y ¡vaya que trabaja!, durante el tiempo que estuve en la administración él se encargó de la administración de todo lo que tenemos, él lo llevo, y creo que mejor que yo, no señor, que yo sepa no, y si alguien sabe pues que lo demuestre”, maliciosamente menciono el “que yo sepa no”, independientemente de que dijo la verdad con “se encargó de la administración de todo lo que tenemos, y creo que mejor que yo”, para lo cual no hace falta demasiado talento. Recordemos que Walterin es famoso por haber hecho “millonario” a su señor padre, nadamás que este era multimillonario.
Pero hay que recordar que en su administración, todos tenían que obedecer las ordenes del Junior, y que ningún gran negocio, fueran obras o servicios –incluyendo los realizados con recursos federales- se realizaban sin que este hijo de “papi” lo autorizara. En cuanto a que esto es “mentira, pruebas, que presenten pruebas”, se le recuerda que se le acusa de corrupto… no tanto de endejo.
En cuanto a que antes de terminar se gestión “limo” asperezas con los Ledezma –acordémonos que por un escándalo que le armo de carteleras, tumbo de la planilla de sindico a Miguel Ángel, aunque por intervención de su hermano Eduardo, mejor conocido como “Pochongo”, la posición recayó en otro consanguíneo de nombre Arturo-, al autorizarle la regulación de un buen números de cartelera o espectaculares –en la misma sesión de cabildo en la que el entonces alcalde regularizo las de su propia empresa-, por lo cual este se esta haciendo como el ”tío lolo” para no investigarlo, ni encausarlo, sigue en su inentendible lenguaje, de que son “puras mentiras, que lo comprueben, eso es lo malo de la política, pregúntenle al Sindico si ha hecho”, como si este pudiera aceptar que esta incurriendo en alguna responsabilidad. Pero eso si, termina presumiendo que el “desaparecido” sindico “está casado con una sobrina suya”. Por lo visto, como casi siempre, todo termina en familia. Ah! que bonita familia.
Para colmo, se burlo de los actuales funcionarios municipales, al decir públicamente que “se les agotó el plazo que existía para que se hicieran observaciones ante Sindicatura y no hubo ninguna”. Por lo que presumió la impunidad adquirida.
También se quejo amargamente de que Astiazarán Orcí, no tubo con el la más elemental cortesía, ya que –según el- nunca recibió el o sus principales colaboradores, llamada alguna para aclarar cualquier duda. El “vejete” cree que con una simple llamada telefónica se aclararía cualquiera de los múltiples negocio$… que ellos prefieren llamar inconsistencias, de la pasada administración.
En cuanto a que si los señalamientos de que si las denuncias publicas responden a una campaña o tienen intención política, respondió en su cantinflesco estilo, “eso no es problema mío, que respondan ellos”. Si no es problema suyo para que tanto brinco y escándalo de su parte.
Pero eso si, “guarin, guarin” pero no tanto, dice que el doctor Astiazarán no es responsable de la situación… aunque éste último no le conteste las llamadas telefónicas. Calificando como chismes de gente mal intencionada cualquier afirmación en cuanto a problemas entre ambos. Imagínese si no fuera así.
En un recule digna de mejores causas, Jorge Astiazarán, después de participar en un muy celebrado linchamiento de su antecesor en el cargo, el impresentable e in entendible Carlos Walterio Bustamiente, salio con que dijo su mama que siempre no, o lo que es lo mismo, que el Ayuntamiento no está en quiebra. Rechazando lo que esta a la vista de todos, el enfrentamiento con el exalcalde Bustamiente. Llegando al extremo del ridículo al afirmar que le “sacaba” al pleito… o lo que es lo mismo, «no hay por qué enfrentarse, no tenemos por qué subirnos al ring, el ayuntamiento no está en quiebra». Mientras la gente habla de “puñales” y “puñalescos”.
No conforme con diezmar más las de por si raquíticas finanzas municipales, al contratar –ante la ineptitud manifiesta de sus empleados… digo funcionarios- una auditoria externa a cargo del Contador Público Roberto Zavala, invito a “ustedes los medios, incluso al Colegio de Contadores de Baja California, invito a todos los organismos de transparencia, a que se acerquen a la Secretaria de Planeación y Finanzas, a Tesorería, a que revisen los libros del Ayuntamiento», cuando en lugar de tanto rollo, seria mejor que subiera la información a Internet, y así este al alcance de quien quiera revisarlo. Sobre todo, si transparencia es lo que busca.
En cuanto a que algunos funcionarios, tanto de la actual, como de la pasada administración han estando dirimiendo en la prensa las finanzas e irregularidades detectadas, expreso que «cada quien está en su derecho de opinar lo que quiera, este es un país libre, pero no hay que enfrentarnos, hay más cosas en común en los tijuanenses que estar enfrentándonos con cosas estériles, finalmente la historia es la que juzga todo», eso puede valer para los exfuncionarios, pero no para los actuales, que no deberían abrir el hocico… digo boca, sin autorización superior. En cuanto a que “la historia es la que juzga todo», es cierto, como lo es, que salvo excepciones, los funcionarios salen siempre entre reprobados… y apestados.
Lo que se dice es que alguien le comento o recomendó, que mejor no le rascaramucho, no fuera ser que salieran a relucir partidas destinadas a las campañas políticas… incluyendo la suya.
La solución salomónica a este pleito de comadres, seria encerrar a todos los involucrados, ya sea por corruptos, ineptos, incompetentes y demás… o lo que resulte. Con lo cual, ahora si, quien ganaría seria la ciudadanía.
Comentarios:
INTRIGAS: Escrito por Ricardo Madrigal. Jueves, 06 de Febrero de 2014.
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