Marchante / Cotuco

Cicuta

Jaime Flores Martínez

Marchante

Insatisfecho con la riqueza acumulada por la explotación de ciudadanos que buscan salir de la miseria, el dirigente de vendedores de Mercados sobre Ruedas José Jiménez Álvarez es previsor con sus descendientes. Como entender que don José decidió heredarle a sus hijos el jugoso negocio de exprimir el bolsillo a sus agremiados.

Y es que don José está chapado a la antigua al suponer que la dirigencia que ostenta es “un coto de poder” que puede repartir entre sus seres queridos. Desde el año pasado don José puso en manos de sus hijos (Mauricio y Ricardo) la facultad de tratar a los tianguistas como les viene en gana.

Ellos pueden exigir, mover, cobrar, amenazar e incluso golpear a los comerciantes que no quieren alinearse mientras don José reposa a pierna suelta en su amplísima residencia, desde donde mantiene el control de diversos mercados sobre ruedas. El más importante es el que opera los domingos en la colonia Francisco Villa de Tijuana.

Muchos de los locatarios inconformes por el saqueo constante don José y sus vástagos, aseguran que su dirigente abandona (sin pudor) su obligación de defender a sus agremiados para lamerle las botas a la autoridad municipal.

Para lambisconear a los funcionarios encargados de vigilar el buen funcionamiento de los mercados móviles, este hombre organiza formidables comilonas para agasajarlos y obtener favores. Don José obliga a los vendedores “recién integrados” a su grupo a cooperar con muchos kilos de filete para la preparación de la carne asada, además de cantidades industriales de cerveza y tequila.

Jiménez sabe que los nuevos miembros de su gremio representan dinero fresco para la familia Jiménez. Para ejemplificar los ingresos diarios de la familia Jiménez, el columnista se referirá a un vendedor de ropa usada, quien debe pagar 20 pesos para su dirigente.

También debe pagar 10 pesos por concepto de «guardia», además de 15 pesos para la recolección de basura. El comerciante debe pagar mil 750 pesos por el permiso anual que expide el Gobierno Municipal sin contar con los 3 mil pesos que debe aportar por su «ingreso al grupo de Jiménez”.

Aquellos comerciantes que apoyaron a Jiménez en la crisis del 2010 –donde el comerciante Eduardo León intentó desconocer su liderazgo–, ahora chocan con él por su desdén y su apatía. Don José prefiere marginarlos hasta colmarles la paciencia, pues al renunciar a su organización podrá meter comerciantes nuevos, agachones, disciplinados y dispuestos a regalar su dinero.

¿Como entender que en estos tiempos existan líderes autoritarios dispuestos a cualquier cosa para mantenerse en el poder?. En el caso de don José Jiménez y sus hijos, echan mano de las traiciones, las habladurías y grillas para enfrentar a los comerciantes inconformes.

Para mantener el control absoluto, incluso utilizan grupos de choque para mantener aterrados a sus detractores. Al menos en el mercado sobre ruedas de la Pancho Villa estos señores utilizan una pareja de mujeres que cumplen las labores de coordinadores y cobradoras de piso.

Ambas damas amedrentan sin empacho a quienes se muestran inconformes por las políticas implementadas por su dirigencia. Primero lanzan miradas asesinas, luego mientan la madre y después agreden.

Sin reparar en las amenazas de muerte, ambas mujeres también proceden a la incautación de mercancía y levantan los hombros ante la represalia de la autoridad. Nadie podría negar la existencia de contubernio entre los Jiménez y la autoridad.

Cualquier pretexto es aprovechado por estas mujeres para descargar su furia contra el comerciante que invadió por centímetros el espacio físico de su vecino de al lado. Cada “cuadro” (equivalente a 9 metros cuadrados).

Mientras la autoridad tolera y hasta fomenta los abusos contra la clase necesitada, don José es solamente un ejemplo de los cacicazgos que invaden el país.

Cotuco

Antes de que el escándalo alcanzara un nivel de rasca-cielo, el director del Comité de Turismo y Convenciones (Cotuco) Alan Bautista decidió presentar su renuncia. Cicuta publicó el viernes pasado que el nuevo presidente de Cotuco Miguel Ángel Badiola Montaño habría contratado una empresa privada para auditar las finanzas de ese organismo.

Apenas leyó el contenido de esta columna, Bautista se plantó frente Badiola para presentarle su renuncia. No obstante deberá responsabilizarse de los manejos del dinero que estarán bajo revisión del Órgano de Fiscalización (Orfis).

Este mediodía será la entrega recepción, lo que significa que Alan Bautista deberá responder sobre las irregularidades que encuentren los auditores. El asunto es que Bautista se precipitó al renunciar a su cargo. Cicuta hizo referencia de “algunas” eventuales torceduras. ¿Serán más graves de lo previsto? Por lo visto se encontrarán fracturas, que no facturas.

Radio

El periodista Fernando del Monte y el autor de Cicuta son mancuerna en Fórmula Tijuana, que se transmite de lunes a viernes a la una y media de la tarde por la frecuencia 950 de amplitud modulada, Radio Fórmula Tijuana.

Cicuta.com.mx twitter: @jaimecicuta   Lunes, 20 de Octubre de 2014.


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *