PÉSIMO / ATRACOS

INTRIGAS

 

PÉSIMO

De mal en peor está el servicio en el Registro Público de la Propiedad y de Comercio del estado, esta dependencia que llego a ser una de las mejores a nivel nacional, entro en franco declive a partir de la pasada administración comandada por el impresentable José “Lu pillo” Osuna Millón… digo Millán.

En la actual administración de Francisco Arturo “Kiko” Vega de Lamadrid, como administrador (ya que gobernador es mucho decir) del estado, de plano ha sido el acabose. Conocido por nombrar a sus “compinches”, no a los mejores calificados, se “pulió” con los designados para esta importante institución.

Nombro director a José Antonio Araiza Regalado, el cual ya lo acompaño hace algunos ayeres en el ayuntamiento de Tijuana, donde se desempeñó como Delegado Municipal en la Delegación San Antonio de los Buenos, donde no dejo muy buena imagen que digamos, aunque fue premiado (como siempre sucede con los compinches) con la diputación local, donde “brinco” para colaborar en los “bisnes” digo en la CESPT con el famoso “Lu pillo” Osuna, de ahí a unos puestos más, incluyendo su paso por el Registro Civil del estado. Se obvia el decir que siempre está puesto para servir al “jefecito” en turno, sin dejar pasar los inevitables “negocios”.

Como subdirector a David de la Rosa Anaya, con los apellidos de una de las familias usufructuarias del poder panucho en estado, por lo que siempre tiene “hueso” a su disposición, con todo lo que eso conlleva.

Y como no podía faltar, para la delegación más importante del estado, es decir Tijuana, donde se concentra la mayor cantidad de trámites y de “negocios”, nombraron a un “ave de las tempestades”, que presidio uno de tantos colegios de profesionistas (desconocido) para uso y abuso de los azules; con fama de “come solo” o “clavadista olímpico” (ya que no “salpica” a los colaboradores); con un turbio paso al frente de la defensoría de oficio estatal; denunciado en su momento ante la Procuraduría de los Derechos Humanos por prestación indebida del Servicio Público; denunciado por el delito de fraude, presuntamente cometido en el dos mil cinco, cuando se desempeñaba como juez de lo Contencioso Administrativo del ayuntamiento de Tijuana, al lucrar con un permiso para la venta de bebidas embriagantes, valiéndose de su cargo; estas son solo algunas de las “cartas de presentación” de José Antonio Moran Rangel.

Moran Rangel, conocido en el ambiente como el “padrotito”, por su propensión a vestir como tal y “atropellar” a usuarios que hacen alguna de las interminables filas para tramites en las oficinas del registro público ubicadas en Tijuana, dicho atropellamiento, lo hace por la desesperación de evitarse la fatiga de darle la vuelta a la fila, para poder saludar a alguna conocida de “buen ver”, con la que pasa el mayor tiempo posible “cotorreando”, volviendo a utilizar la maniobra del “atropellamiento” para regresar a su lugar de (disque) trabajo.

También es notorio, que cuando no conoce a la usuaria con “buena presentación”, se conforma con “desvestirla” con “lujuriosa y torva” mirada, la cual no pasa desapercibida por los presentes, incluyendo muchas veces a las afectadas. Según todo aparenta, ese es el modelo de servidor público que promueve “Kiko”.

Si usted tiene alguna duda, o necesidad de tratar algún asunto con José Antonio Moran, a no sea que pertenezca a su círculo de cuates, compinches o socios de negocios, o claro… sea una “chulada” de chamaca, mejor pierda la esperanza, ya que difícilmente, por no decir que será imposible ser recibido por tan folclórico y nefasto personaje metido a funcionario público.

Mientras todo esto sucede y acontece, en uno de sus múltiples y constantes viajes (este a la ciudad de México), Francisco “Kiko” Vega solicito al gobierno federal, recursos millonarios para modernizar el citado registro público de la propiedad. Sin tomar en cuenta, menos en consideración, que con los nombramientos que hizo termino de “desmadrar” la citada institución.

Ya que independientemente del negro historial que los precede, en el tiempo que llevan a cargo, han demostrado una descomunal ineptitud. Baste decir (solo como uno de tantos ejemplos) que un trámite que en la administración pasada se hacía en un día, en la actualidad se lleva una semana. Ni que decir que con el afán de recaudar, cobran un servicio, y cuando el usuario se presenta a recogerlo, le informan que debe de cubrir un importe extra (y tardarse una semana más) sin que fundamenten, menos motiven su exigencia. Si alguien se atreve a preguntar el porqué, solo atinan a decir: que porque así es (nada más, nada menos), el pedirles una explicación legal, conlleva a que digan que no saben, y que el único que podría darla es el delegado, pero que no podrá recibirlo porque está muy “atareado”. Es obvio decir que si usted requiere en documento, tendrá que callarse y realizar el nuevo pago solicitado. Pero según nuestro inefable y no siempre verídico “gober pernicioso”, “la gente manda”. Si, como no. A otro perro con ese cuento.

ATRACOS 

En verdaderas casetas de cuota… o puntos de extorsión y atraco, se han convertido los retenes, puntos de revisión o como quieran denominarlos, que instalan las corporaciones policiacas (municipales estatales o federales) en todo en estado.

Tenemos por ejemplo la carretera Tijuana-Mexicali o Mexicali-Tijuana, como prefiera, a uno o dos kilómetros del retén fijo que tiene instalado el ejército, por el rumbo de La Salada, se instalan con unos pocos metros de distancia, un par de retenes o volantas, uno de (aunque usted no lo crea, ya que prácticamente están desaparecidos) policías ministeriales federales, antes AFIS, antes judiciales federales, con una manta y dos o tres unidades, parando a todo aquel que –según ellos—pueda ser sujeto de extorsión; otra de la policía federal (sección caminos) realizando exactamente las mismas acciones. Estos retenes, volantas, puntos de revisión o como los quieran nombrar son ilegales además de inconstitucionales, usted dirá que igual que los de las fuerzas armadas, y tiene toda la razón, pero con la diferencia de que los soldados y marinos no extorsionan ni maltratan a quienes revisan, independientemente de que tanto ellos como sus puntos de revisión están perfectamente identificados, no como los de las corporaciones policiacas.

Así como este reten de las policías federales, hay muchos más instalados por todo el estado. Bien dicen que los famosos Cuadrantes, en realidad son cotos de caza (de incautos) para estos malos elementos.

Que quede claro que no defendemos ni apoyamos a estos puntos de revisión militares, pero son instalados por órdenes de muy arriba, que es a quien tendríamos que reclamar y repito, en términos generales no maltratan, menos extorsionan a los ciudadanos, a diferencia de las corporaciones que solo los instalan para ver que cae, y cuanto pueden “ganar”.

En Tijuana, estos retenes son la constante por toda la ciudad, implementados por las policías municipal y estatal preventiva (cada quien por su lado), los que son fuente de caos vial, amedrentamiento y extorsión hacia los ciudadanos, y lo que resulte. En cualquier vialidad de la ciudad se paran dos o tres patrullas, montan su inspección… y a servirse se ha dicho.

Muchas de estas revisiones se montan en puntos ciegos, y por lo tanto peligrosos para los conductores, los cuales ya han causado un buen número de sustos a los mismos, y un número indeterminado de accidentes.

Ya no se diga, los del grupo de disque “inteligencia” de la municipal, que andan ilegalmente “levantando” a quien les parezca, disque para hacer investigaciones, usurpando las funciones de la policía ministerial. Ejemplos hay muchos y ya los tocaremos en otras columnas, basta decir que están constantemente inmiscuidos en casos de tortura, muchos de ellos documentados por los juzgados, como el caso de unos detenidos a los que para que confesaran “violaron” con un objeto contundente (herramienta para cambiar llantas de automotores), y como ese muchos “incidentes” más.

Como a los pepos (estatal preventiva) no les gusta quedarse atrás, pelean el primer lugar en cuanto a las violaciones a los derechos humanos de los detenidos, muchas de ellas consignadas en tribunales, sin que ningún mando intervenga, menos de la Osa… digo Rosa, que parece disfrutar y hasta premiar dichas conductas.

Casualmente en los últimos días, se han visto camionetas (tipo Suburban) de color oscuro, por cierto con placas de California, lo que confirma que no son unidades oficiales, con pepos en su interior, deteniendo violentamente conductores que pacíficamente circulan por las vialidades de la ciudad. Según comentan,  estas unidades están bajo las órdenes del titular operativo, el cual por cierto es el exdirector de la corporación y hombre de todas las confianzas de secretario, y su principal función es recaudatoria.

Es más, según conocedores de la materia dicen que no entienden todo el escándalo que trae el “gober pernicioso” “Kiko” Vega y señora, con eso de la recaudación de fondos para el CRIT, ya que ordenando que lo que estén recaudando estos muchachitos, sea entregado para el citado centro de rehabilitación, seria asunto resuelto. La realidad es que sufren porque quieren. O de plano les están “picando” los ojos. Mientras como siempre, que se jodan los ciudadanos. Al fin que solo son tontos… digo votos útiles.

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INTRIGAS. Escrito por Ricardo Madrigal.     Jueves, 03 de Julio de 2014.


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