La Nota Roja / Chuy Velazco, el narco-funcionario

TERTULIA POLÍTICA
Miércoles, 17 de Febrero de 2016.
La Nota Roja
Chuy Velazco, el narco-funcionario
Por Pedro Martínez Serrano
Ahora que se le ha cumplido su más caro anhelo, el corrupto Jesús Chuy Velazco, dirige a su antojo los dineros de la Dirección de Comunicación Social del municipio de Tijuana, posición obtenida a base de servilismo y tras una clara secuela de traiciones.
Ahora el que debe de cuidarse de la desleal costumbre, o más bien dicho maña, de Chuy Velazco, es su ex patrón inmediato, el bofo Bernardo Padilla, que luego de haberse engrapado el estómago, aparece con una imagen enfermiza.
Pero del Gato de Bernardo Padilla, hay mucho que decir, entre otras situaciones, que en 2004 fue sometido por su familia a un severo tratamiento contra las adicciones, sin embargo, ahora que se ha convertido en otro millonario en el gobierno del también corrupto alcalde Jorge Astiazarán, y a pesar de su ancianidad, goza del noviazgo, de una escultural belleza, que para mayores referencias, haciendo gala de su cuerpo, muestra singulares y provocativos tatuajes.
Pero la evidente bonanza que ahora disfruta el ex jefe de prensa de la Procuraduría General de la República en Baja California, también ha tenido sus contrastes y sinsabores.
Una de las traiciones a las que está acostumbrado, el ahora flamante director de Comunicación Social del Ayuntamiento, se registró durante el gobierno del casinero Jorge Hank Rhon, en ese entonces el secretario de Gobierno era El diablo, el ahora embajador de México en Argentina, Fernando Castro Trenti y tenía a su lado al Diablito, al remedo de político; al pelele y servil imitador, el también insano, Ariel Lizárraga (ahora gato de angora del imbécil que preside el PRI en Baja California, Cris López Alvarado, por capricho de Manlio Fabio Beltrones, su padrino), quien cometió el error de dar la mano que luego le mordería El Chuy Velazco.
Pues a pesar de que el camaleónico panista, lo recomendó con Castro Trenti, para sacarlo de la penuria y miseria en la que cayo causa de sus adicciones, luego, el recomendado dio inicio a una serie de ataques que a la postre fueron descubiertos.
Otra raya en el tigre, se puede decir, es la más reciente, cuando tiro la tarascada a su bienhechor Mario Madrigal, al cocainómano apodado El elefante, que sin saber que le iba a pagar mal, le dio empleo como su secretario particular y después lo recomendó en el gobierno de Carlos Bustamante y también en el de Jorge Astiazarán, hoy el Chuy, esta convertido en el patrocinador de una maquillada campaña de ataques en medios de comunicación, en contra del hijo de Mario Madrigal, que funge como funcionario juvenil en este desprestigiado gobierno municipal.
Es tan traicionero y perruno, el enamorado Velazco, que no disimula su prosperidad; ahora viste ropa cara y de marcas de prestigio, cuando ayer andaba levantando garras de tianguis y swat meet. Hoy gasta mucho dinero, que tiene su origen en las extorsiones que personalmente cobra desde hace más de dos años a la mafia de lenocinio en Tijuana.
Chuy Velazco, ahora que logró tener a su disposición en presupuesto de Comunicación Social del gobierno municipal, seguramente que pronto incurrirá en una de su acostumbradas traiciones en contra de del señorito Bernardo Padilla, que por cierto no la tiene muy segura en caso de que sea candidato a diputado local por el 16 distrito, pues entre los que ha traicionado, están dispuestos a hacer hasta lo imposible, cueste lo que cueste, para que pierda la elección.
Acostumbrado al embuste y doble cara, mientras cuenta y manotea el dinero del erario y el que cobra por extorsiones, debe estar haciendo creer a Bernardo Padilla que le será fiel hasta que la muerte los separe, sin embargo, pronto, se registrara un nuevo acto de traición del Chuy.
Lo que espera Velazco, es que gane Bernardo para que se vaya, y entonces sin escrúpulo alguno, terminar con lo que le resta al presupuesto de la oficina y a su cargo y de paso con las relaciones de hampa que ha logrado, ofrecer a quien sea candidato a presidente municipal por el PRI, sus servicios y conexiones, para patrocinio de la campaña en puerta.
Para que se compruebe esta teoría, solo hay que esperar y comprobar, que al perro que traga perro, aunque le quemen el hocico.
Pero si no le salen las cosas como espera, entonces a ver cómo le hace Chuy Velasco, para sostener el tren de vida con su joven novia, a la que por cierto, le regalo hace poco un lujoso automóvil nacional y último modelo.
Hay que recordar que las fotografías y las matemáticas, no mienten.
Hasta la próxima, pásenla bien, como el Chuy.


Comentarios

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *