Clamor

Cicuta

Por Jaime Flores Martínez

Lunes, 18 de Julio de 2016.

Clamor

Desesperada porque la justicia en Baja California es lo más parecido al contenido de una alcantarilla de mercado, la señora Silvia Leonor Aguiar Tirado reconoce que su última esperanza es el gobernador del Estado Francisco Vega de Lamadrid.

¡A buen árbol se arrima!

Por andar de «buena gente» a doña Silvia le arrebataron las valiosísimas propiedades que heredó de su padre Federico Aguiar Barreto.

A pesar de ser hija adoptiva doña Silvia recibió de su padre una treintena de propiedades que incluye casas, terrenos y locales comerciales distribuidos en todo Tijuana.

Evidentemente conmovida por el hondo pesar de su señora madre, Silvia Aguiar decidió «donarle» la totalidad de su herencia.

Con casi 8 décadas a cuestas, Juana Delia Tirado Félix (madre adoptiva de Silvia Aguiar) decidió regresarle los bienes a su generosa hija.

Vale señalar que todas las transacciones se realizaron conforme a la ley y de ello existen documentos notariados.

Mientras madre e hija “se peloteaban la herencia” apareció en escena su ex nuera Basilia Salazar Solís, viuda de su fallecido hijo Mario Alberto Espinosa tirado. Doña Juana tuvo tres hijos de un matrimonio anterior.

Ni Basilia, ni su finado esposo ni sus hijos se preocuparon antes por doña Juana. ¡De repente surgió el amor por la abuelita! ¡Cuanta ternura!

Desde ese momento doña Silvia inició un viacrucis que se ha extendido mas una década, con el ingrediente del manoseo excesivo de personajes vinculados al poder.

Aquí entra el “influyentismo” de la licenciada María Teresa de Jesús Valadez, quien despachó como sub-procuradora de justicia en Tijuana.

La licenciada Valadez, comadre de Juana Delia Tirado Félix ha metido la mano hasta el codo por lógicos intereses que resultan difícilmente comprobables.

Se supone que su insistente intervención en el caso tiene por objetivo quedarse con un trozo de tan delicioso pastel.

El asunto es que la licenciada Valadez ha movido piezas de su tablero, hasta el punto de influir en las resoluciones de integrantes del Tribunal Superior de Justicia del Estado, donde intentan jugar con el presidente Jorge Armando Vázquez.

La misma Valadez ha dicho que se lleva «de piquete de ombligo» con la ex presidenta del Tribunal María Ester Rentería Ibarra.

Esta última influyó para que en el Juzgado Quinto de lo Civil otorgaran la posesión física de las propiedades a los demandantes, es decir, ya despojaron a Silvia Aguiar de su herencia.

Cierto que la señora Juana Delia, madre adoptiva de Silvia, tendría obligadamente que decidir el destino de las millonarias propiedades.

Sin embargo, a sus más de 80 años, doña Juana Delia padece demencia senil y por tanto es fácilmente manipulable por sus nietos.

Y aunque la licenciada Valadez no tiene una estrecha relación con la señora Basilio ni con sus hijos, la avanzada edad de su comadre Juana le abren los ojos para quedarse con una parte de la riqueza.

¡Al menos no se visualiza otra explicación de su incesante activismo!

Tanta presión ejercieron sobre ella, que doña Silvia debió autoexiliarse en los Estados Unidos.

Los abogados de su contraparte solicitaron a un juez una orden de aprehensión por el delito de secuestro ¡en agravio de su propia madre!

Metidos a fondo en el asunto, los nietos de doña Juana acusan a Silvia de haber secuestrado a su abuelita.

Ahora, como en los juzgados se toman vacaciones por un mes, la resolución final podría darse a mediados del próximo mes de agosto.

Desde el exilio, doña Silvia se dice aterrada de la corrupción y la inseguridad que se vive en Tijuana.

Silvia ya no sabe a quién recurrir porque siente que María Teresa de Jesús Valadez, verdaderamente tiene control sobre la justicia.

Por eso clama al gobernador del Estado Francisco Vega de la Madrid intervenga en el asunto.

Doña Silvia asegura que no pretende tener un trato preferencial, sino simplemente que se aplique la justicia.

Si los nietos de doña Juana Lilia tienen derecho a la herencia, entonces que se resuelva.

No hay duda que la figura de la licenciada María Teresa de Jesús Valadez, actual encargada de los asuntos jurídicos de la Secretaría de Seguridad Pública Municipal, aumentan la sospecha. Si no tiene vela en el entierro, entonces ¿porque tanto interés?

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