Ludovico

Cicuta

Por Jaime Flores Martínez

Miercoles, 21 de Septiembre de 2016.

Ludovico

Abrumado al comprobar que su imperio político en Baja California se encuentra prácticamente desarticulado, el actual embajador de México en Argentina Fernando Castro Trenti se revuelve en su intento de retomar los controles del PRI en la entidad.

¡El Diablo se resiste a perder el poder!

¡Además, está furioso porque sus perpetuos incondicionales lo abandonaron!

Y es que desde su nombramiento como jefe de la diplomacia mexicana en Argentina, Castro Trenti dejó de ser el dueño absoluto del PRI en Baja California.

Acostumbrado a mangonear a placer a sus aplaudidores, desde su arribo a la república Argentina este hombre ya no puede “negociar” con otros partidos las derrotas del tricolor.

La semana pasada, durante su estancia en Baja California, Castro aprovechó la coyuntura para reunirse en privado con Jaime Bonilla Valdez, dirigente estatal del Movimiento de Regeneración Nacional (MORENA)

Se supone que el Demonio le pidió espacio a Bonilla para incrustar algunos de sus seguidores, es decir, abrir espacio a aquellos que todavía le rinden pleitesía.

¿Pero a que vino Castro Trenti a Baja California, en lugar de quedarse en Argentina?

Lejos de encabezar la ceremonia del Grito de Independencia en Argentina (el pasado 15 de septiembre) Castro arribó a Tijuana para reunirse con lo que queda de su poderío.

El embajador mexicano prefirió venir a Tijuana a regañar a sus peones y a tronar contra aquellos que dejaron de considerarlo su máximo líder.

Algunos se refirieron al real rompimiento entre lo que queda de Castro y el candidato priísta a la alcaldía de Tijuana René Mendívil Acosta.

El propio Castro Trenti  (ubicado en público y en privado como el Diablo) escupió su rencor contra Mendívil porque éste decidió romper el cordón umbilical con «el demonio», incluso ante el riesgo de ser víctima de su furia.

Durante su reunión con su disminuido ejército el pasado jueves, el “diplomático demonio’ les dijo que Mendívil se distanció porque en el 2013 no fue considerado candidato a la alcaldía.

En esa misma elección Castro Trenti salió derrotado como aspirante priísta a la gubernatura de Baja California y poco después fue nombrado embajador mexicano en Argentina.

¡Hay quien dice que al Diablo lo expulsaron a la Patagonia!

La todavía regidora Marta Rubio (incondicional del demonio) se encargó de convocar a una reunión el jueves en un hotel de la ciudad.

El señor embajador daría tiempo para reunirse con ellos. ¡Una oportunidad única para asistir al besamanos!

Asistentes a la comida posterior a esa reunión aseguran que Castro Trenti se deslindó de la denuncia presentada por el ex secretario de Acción Electoral del PRI Obed Silva Sánchez.

Hace justo una semana, Obed Silva emplazó al INE a exigirle al dirigente estatal del PRI Chris López Alvarado la urgente convocatoria para la renovación de las dirigencias de ese partido en Baja California.

Aunque Obed es parte de sus incondicionales, el Diablo rechaza estar detrás de Obed. Además aclara que tampoco es su intención el destronar a Chris de la dirigencia de su partido.

¡Lo malo para el Diablo es que nadie le cree!

Pasadas las elecciones de junio de este año, Cicuta se refirió a la intención que tendría el Diablo de destronar a López de la dirigencia del tricolor.

El columnista subrayó que “el diplomático demonio” utilizaría al actual alcalde de Ensenada Gilberto Hirata Chico, quien presionaría la salida de López Alvarado.

A casi tres años de su partida a la Patagonia, Castro Trenti está convencido de sus desventajas.

Él sabe que algunos de sus incondicionales han decidido cobijarse bajo el manto de su acérrimo enemigo, el casinero Jorge Hank Rhon, quien por cierto ni siquiera se ha preocupado por desprestigiar al Diablo. ¿Se puede desprestigiar a alguien que no tiene prestigio?

Con su acostumbrado desenfado (Hank es un personaje acostumbrado a la opulencia) el zar del juego observa como en el tablero político las piezas “castrotrentistas” se desintegran sin su presencia.

El Demonio sabe que en el menor descuido su enemigo Hank podrá colocar a uno de sus incondicionales en la dirigencia estatal priísta.

Si Castro concluye su periodo como embajador en Argentina, seguramente regresará a Baja California a patear botes.

En su conversación del jueves, dijo a sus oyentes que lamentaba que Rene Mendívil se haya acercado a Hank en su ausencia.

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